CRÓNICA DE UNOS GITANOS ALBOROTADOS[1]
Y si, debo confesarlo. Si bien no lo hice en el marco de ningún “tour croata espectacular”, ni menos aún escalando alguna “cumbre eslava”, fui… El pasado 14 de Febrero fui al Metropolitano de Rosario a ver a Emir Kusturica and “The No Smoking Orchestra”[2]…
La verdad es que fui obedeciendo a mi instinto de cronista y periodista (si bien amateur). Por esencia soy una persona muy curiosa. Y además, me gusta opinar, pero con propiedad, no opinar por opinar, como hace gran cantidad de gente en nuestra querida Argentina… Por lo tanto fui a verlo… Eso sí, aclaro, no gaste un peso, ya que gracias a las gestiones de una Señorita muy importante, conseguí entradas gratis… Asimismo, me presenté luciendo una remera croata con el alfabeto glagolítico, ya que la de la selección todavía emanaba cierto aroma del partido del día anterior…
En principio, creía que no me sentiría muy incómodo ya que, si bien mi amigo Iván Grbac me había comentado algo al respecto, tenía entendido que no era un nacionalista serbio sino uno de esos “muchachos idealistas” que se consideran “ciudadanos del mundo” y no comulgan mucho con los nacionalismos…
Sin embargo, en ciertos momentos sí que me sentí incómodo… Es que en alguna de sus canciones, de las que ellos señalaban como representativas de la música serbia, apareció el saludo con los tres deditos… Y si bien sabemos que esos dedos significan la señal de la cruz para los miembros de una religión hermana a la nuestra, también sabemos que más que a la religión, representa a su patria y uno no puede dejar de pensar en las innumerables ofensas y agresiones que recibió Croacia con esos tres dedos… Casi como un acto reflejo, apenas vi eso, inmediatamente saqué mi celular y puse “Bojna Cavoglave”… Lamentablemente, no se escuchaba nada, pero por lo menos me saqué las ganas…
En lo que respecta a lo estrictamente musical, me encontré con una síntesis de ritmos árabes, griegos, rusos, italianos, hindúes y demás… Una perfecta ensalada… Una música divertida, movida y festiva. De todos modos, con el correr de los minutos, inevitablemente termina tornándose repetitiva y monótona…
Una mención especial merecen el violinista y también el mismo Kusturica al frente de la guitarra… En cuanto al líder y cantante, Dr. Nele Karajilic, si bien en ciertas ocasiones parece divertido, en la mayoría de ellas termina siendo, con su disfraz de hombre alado y sus estrambóticos pasos, cuasi payasesco…
Por último, cabe destacar que si bien están considerados como el grupo más famoso y representativo de la música serbia, lo cierto es que sus canciones se limitaban al salto, el baile, el ritmo desenfrenado y a alguna que otra sátira política y/o mediática, como por ej “Fuck you MTV”.
Desde ya, si comparamos con el grupo más famoso y representativo de Croacia, hay algo que evidentemente está faltando… Sí, mis queridos oyentes… Falta Dios, falta la Patria y falta el Hogar… Es por eso que Bar Croata se ha planteado un objetivo y, como tantos otros que se planteó anteriormente, lo piensa lograr: si Rosario recibió a esta banda, no vemos por qué razón no puede recibir a Marko Perkovic THOMPSON. Sabemos que será difícil, quizás tengamos que conformarnos con Buenos Aires, pero Bar Croata está firmemente decidido a agotar todas las instancias para recibir en la Argentina a nuestro querido y valiente Marko!!! Esperamos y deseamos lograrlo!!!
[1] Dr. Carlos Bukovac, miembro del Staff de Bar Croata
[2] Como siempre suele haber algún malintencionado, aclaramos desde ya que el presente comentario de ninguna mantera tiene la finalidad de incitar a la violencia ni al odio entre los pueblos sólo se trata de una crítica de espectáculo.
Y si, debo confesarlo. Si bien no lo hice en el marco de ningún “tour croata espectacular”, ni menos aún escalando alguna “cumbre eslava”, fui… El pasado 14 de Febrero fui al Metropolitano de Rosario a ver a Emir Kusturica and “The No Smoking Orchestra”[2]…
La verdad es que fui obedeciendo a mi instinto de cronista y periodista (si bien amateur). Por esencia soy una persona muy curiosa. Y además, me gusta opinar, pero con propiedad, no opinar por opinar, como hace gran cantidad de gente en nuestra querida Argentina… Por lo tanto fui a verlo… Eso sí, aclaro, no gaste un peso, ya que gracias a las gestiones de una Señorita muy importante, conseguí entradas gratis… Asimismo, me presenté luciendo una remera croata con el alfabeto glagolítico, ya que la de la selección todavía emanaba cierto aroma del partido del día anterior…
En principio, creía que no me sentiría muy incómodo ya que, si bien mi amigo Iván Grbac me había comentado algo al respecto, tenía entendido que no era un nacionalista serbio sino uno de esos “muchachos idealistas” que se consideran “ciudadanos del mundo” y no comulgan mucho con los nacionalismos…
Sin embargo, en ciertos momentos sí que me sentí incómodo… Es que en alguna de sus canciones, de las que ellos señalaban como representativas de la música serbia, apareció el saludo con los tres deditos… Y si bien sabemos que esos dedos significan la señal de la cruz para los miembros de una religión hermana a la nuestra, también sabemos que más que a la religión, representa a su patria y uno no puede dejar de pensar en las innumerables ofensas y agresiones que recibió Croacia con esos tres dedos… Casi como un acto reflejo, apenas vi eso, inmediatamente saqué mi celular y puse “Bojna Cavoglave”… Lamentablemente, no se escuchaba nada, pero por lo menos me saqué las ganas…
En lo que respecta a lo estrictamente musical, me encontré con una síntesis de ritmos árabes, griegos, rusos, italianos, hindúes y demás… Una perfecta ensalada… Una música divertida, movida y festiva. De todos modos, con el correr de los minutos, inevitablemente termina tornándose repetitiva y monótona…
Una mención especial merecen el violinista y también el mismo Kusturica al frente de la guitarra… En cuanto al líder y cantante, Dr. Nele Karajilic, si bien en ciertas ocasiones parece divertido, en la mayoría de ellas termina siendo, con su disfraz de hombre alado y sus estrambóticos pasos, cuasi payasesco…
Por último, cabe destacar que si bien están considerados como el grupo más famoso y representativo de la música serbia, lo cierto es que sus canciones se limitaban al salto, el baile, el ritmo desenfrenado y a alguna que otra sátira política y/o mediática, como por ej “Fuck you MTV”.
Desde ya, si comparamos con el grupo más famoso y representativo de Croacia, hay algo que evidentemente está faltando… Sí, mis queridos oyentes… Falta Dios, falta la Patria y falta el Hogar… Es por eso que Bar Croata se ha planteado un objetivo y, como tantos otros que se planteó anteriormente, lo piensa lograr: si Rosario recibió a esta banda, no vemos por qué razón no puede recibir a Marko Perkovic THOMPSON. Sabemos que será difícil, quizás tengamos que conformarnos con Buenos Aires, pero Bar Croata está firmemente decidido a agotar todas las instancias para recibir en la Argentina a nuestro querido y valiente Marko!!! Esperamos y deseamos lograrlo!!!
[1] Dr. Carlos Bukovac, miembro del Staff de Bar Croata
[2] Como siempre suele haber algún malintencionado, aclaramos desde ya que el presente comentario de ninguna mantera tiene la finalidad de incitar a la violencia ni al odio entre los pueblos sólo se trata de una crítica de espectáculo.
